IDRISS DÉBY:
EL
NAPOLEÓN AFRICANO
Por: Javier Fernando
Miranda Prieto
La prensa adicta al gobierno del presidente chadiano Idriss Déby, no tiene ningún empacho en calificar a su mandatario como el "napoleónico" gendarme africano. |
La prensa chadiana, muy
propensa a exaltar las cualidades de estadista de su presidente, en estos días
no pierde oportunidad en enaltecer las dotes de gran estratega militar del
mandatario Idriss Déby, a propósito de la última ofensiva armada del Ejército
Nacional de Chad, contra las bases militares de las huestes terroristas nigerianas
de Boko Haram, instaladas tanto en el territorio de su vecina Camerún, como en
el propio suelo nigeriano.
Ni los brutales ataques
terroristas, que asolaron a la misma capital chadiana, no han menguado el
prestigio, ni la gran reputación de su líder máximo. “El Chad no se había comprometido en la lucha contra Boko Haram
esperando escapar sin daño. Sabíamos desde el principio que había un precio que
pagar. La guerra contra Boko Haram no ha terminado. Pero sabemos que vamos a
ganar. Contamos para ello con un gran ejército, el más poderoso de la región y
con un gran general, estratega y invencible, el napoleónico Idriss Déby”, parte
del insólito editorial del diario chadiano “Le
Vespéral” publicado el pasado 16 de junio.
A pesar de lo que
escriba la genuflexa prensa chadiana, Idriss Déby no es un Napoleón africano,
aunque muchos de sus seguidores lo consideren así. El mandatario del Chad, es
simplemente un caudillo muy hábil, que durante un cuarto de siglo, ha sabido
esquivar a sus enemigos, evitando los golpes bajos y logrando salir bien parado
de situaciones críticas, siempre con la ayuda de Francia, su antigua aliada y
cómplice. Logrando sobrevivir en una región africana particularmente inestable.
En el antiguo “imperio colonial francés”, donde muchos jefes de Estado están
sentados en asientos eyectables, él es un ejemplo de estabilidad.
Un joven Idriss Déby en los años ochenta, como jefe rebelde de las guerrillas del Ejército del Norte. |
Pero esta longevidad
política no es una casualidad. Es el fruto de una inteligencia táctica, que sus
adversarios la califican de maquiavélica. Combinada con una total falta de
escrúpulos, que lo llevado a eliminar físicamente a sus opositores y
aterrorizar a sus adversarios, lo que le ha ganado el calificativo de tirano y
acusaciones reiteradas de crímenes contra la humanidad. Pero, como el buen
Idriss es reelegido en elecciones pluralistas, aunque amañadas y fraudulentas,
permanece como un fiel demócrata y un aliado incondicional de su antigua
metrópoli y en recompensa, Francia le ha otorgado durante todo este tiempo, una
confianza casi ilimitada.
Aunque Idriss Déby
empezó su vida pública como un militar disciplinado, sin saberlo o quizás sin
quererlo, jugó como una pieza de recambio a favor de los intereses de
franceses, luego que el otrora poderoso Hisséne Habré, se desmarcara demasiado
de los parámetros impuestos desde Paris. En 1,990 las tropas de Déby se
enfrentaron con el ejército del ex-dictador Habré, hasta que el 2 de diciembre
ocuparon la capital del país, la ciudad de Yemena, haciéndose del gobierno y
nombrando a Déby nuevo presidente. Idriss Déby es un hombre con suerte, ha
visto caer al más profundo abismo, tanto a su antiguo compañero de aventuras
Hisséne Habré, como a su aliado y socio africano Moamar Gadafi, en ambos casos
por la ingrata e inapelable y muy temida decisión de Francia.
“Déby ha logrado sobrevivir en una región africana
muy inestable. En donde muchos jefes de Estado
están sentados en
asientos eyectables,
él es un ejemplo de estabilidad”
Pero el presidente de
Chad, no parece que vaya conocer un destino tan funesto. Todo parece indicar
que goza de una posición más ascendente ante la política francesa.
Especialmente, gracias a la renta del petróleo que ha empezado a ser explotada
desde hace unos diez años y gracias a un aguerrido ejército, el más
profesional, mejor entrenado y con mayor equipamiento en toda el África
francófona. Profesionalismo y eficiencia ganada durante los largos años que
tuvo que lidiar, con los más diversos grupos rebeldes, de todo signo:
ideológico, tribal o confesional y teniendo como escenario de estos conflictos,
los inhóspitos y temerarios desiertos chadianos.
El ejército chadiano es el más profesional, mejor entrenado y con mayor equipamiento militar de toda el África francófona. |
La eficacia militar de
los ejércitos de Déby, también le han prestado asistencia a los militares
franceses en su lucha contra el terrorismo en el norte de Malí, asimismo, ha
desempeñado temporalmente el papel de Cascos Azules en la República
Centroafricana RCA, después que Déby sembrara de muerte y desorden, al armar y
financiar a las milicias de Seleka, y ahora prestando sus servicios al norte
de Camerún, contra la ofensiva de Boko Haram. Es decir, todo el aparato
militar, del mejor ejercito de la región, al servicio de los intereses
geopolíticos de Francia. Con esta ejecutoria, es más que seguro, que Idriss
Déby, tenga asegurado un lugar privilegiado en el Parnaso francés erigido para
los tiranos consentidos.
Pero volviendo a lo que
la prensa chadiana está elogiando con tanta elocuencia durante estos días, es
decir, a la ofensiva militar del Chad contra el terrorismo yihadista; habría
que preguntarse: ¿Qué mosca le ha picado a Déby para que ahora ataque a Boko
Haram, un movimiento terrorista al que abrigó no hace mucho tiempo? ¿Está
quizás tocado por la gracia de la lucha contra el terrorismo? ¿Actúa solo por
cuenta de Francia o tienen un juego propio en la región? Lo cierto, es que
desde el mes de abril de este año, sus ejércitos han llegado al norte de
Camerún con cientos de hombre y de vehículos militares, para hacer de policías,
en un país totalmente incapaz de defenderse por sí mismo. Camerún gobernado por
Paul Biya desde hace 33 años, dispone sin embargo de un ejército de cuarenta
mil hombres. Pero son militares insuficientemente capacitados y escasamente
equipados, en razón: de la endémica corrupción de los generales cameruneses,
que desvían buena parte de los presupuestos militares, y sobre todo de la
desconfianza de Biya hacia los hombres vestidos de uniforme, lo que ha
permitido, hasta ahora, evitar ser derrocado por un golpe de Estado.
Camerún, el otro aliado
de occidente tiene un aparato militar de pacotilla, en comparación con la del
Chad, dotado de aviones Shukhois de fabricación rusa, helicópteros de combate
Mi24 y Mi17 y desde hace algunos meses de los caza bombarderos Mig29, contando
también con una unidad anti-terrorista formada y adiestrada por militares
norteamericanos desde el año 2,004.
“Para atajar la amenaza yihadista, el gobierno chadiano
acaba de ejecutar un gigantesco operativo de capturas
deteniendo en Yamena, a miles de sospechosos de tener simpatías con Boko Haram”
Ahora, al desplegar tal
fuerza ofensiva contra Boko Haram, Déby sabía que corría el riesgo de ser
atacado en su propio suelo por esta organización yihadista, quien disponía de una
base de retaguardia en Níger y venía llevando a cabo acciones armadas en
Camerún, con el objetivo de implantarse también, en la vecina República
Centroafricana RCA. Para atajar está
continua amenaza, el gobierno chadiano acaba de ejecutar un gigantesco
operativo de capturas y redadas, deteniendo en la ciudad de Yamena, a más de
mil sospechosos de tener simpatías yihadistas.
Pero como se vio en
Nigeria, la respuesta exclusivamente militar a la barbarie de los barbudos, no
conlleva a la reducción de sus acciones, ni a la mengua de su expansionismo en
la zona. En un país completamente corrupto, como la Nigeria que dejó el
presidente Jonathan, las poblaciones del Norte, que se sienten abandonadas del
poder de Lagos, continúan aportando un apoyo pasivo a los islamistas
nigerianos, con la complicidad de las elites y los políticos locales, disgustados
por su condición de eternos marginados. El nuevo gobierno del presidente
Buhari, debe saber que sin medidas políticas y sociales destinadas a reducir su
influencia, el yihadismo en Nigeria no va ser derrotado de manera duradera.
Confiado en su buena
estrella, que le ha permitido librarse sin daño, de la aventura contra los
islamistas malienses, Idriss Déby no hace consideraciones, ni cálculos
políticos. Al mandar a sus tropas contra Boko Haram, como buen estratega
militar, Déby espera matar dos pájaros de un tiro. 1.- Proteger los intereses
económicos de su propio país, totalmente encerrado geográfica y económicamente.
El Chad no dispone de otra salida que Camerún para asegurar su abastecimiento, mediante
una línea de ferrocarril y para sacar su petróleo, a través de un oleoducto de
un millar de kilómetros. Dos cordones umbilicales amenazados por la presencia de
Boko Haram. 2.- Fortalecer su estatus de gobernante ineludible y confiable ante
los ojos de occidente y en especial de Francia, para seguir siendo, no solo el
napoleónico gendarme africano, sino el tirano consentido que tanto necesita
occidente en África.
Gracias
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